Les escribí a mis hijos…

30 marzo 2009
Hola queridos y queridas... me inscribí en este curso de la prosperidad... por pura curiosidad... y decidí hace unos minutos reenviarles estos email, por si están interesados... el tema de la prosperidad es algo tan relativo... así como el tema del éxito... yo, para ustedes siempre pido a los dioses y al universo, en una oración cotidiana: salud, trabajo, actitud critica ante la vida, capacidad de comprender que la felicidad la llevamos dentro, capacidad para sorprenderse y tener esperanza en cada momento de sus vidas... la suficiente prosperidad para que no pasen apuros, pero la suficiente dificultad para que aprecien lo que la vida les brinde... hoy fue tema de sobremesa en el almuerzo de la oficina, que habrían hecho si ganaran la lotería como ese salvadoreño de los 26 millones en USA... todos y todas piensan en viajes a los diferentes confines del mundo, uno hasta con pagar uno de esos viajes al espacio exterior, piensan en ir a ver partidos de futbol de sus equipos favoritos, en no volver a trabajar nunca mas en la vida, comprarse joyas, hacerse cirugías estéticas, y darle "lo mejor" a sus hijos... lo mejor, según ellos lo entienden... solo una chica, Katia, nuestra recepcionista, a quien respeto tanto porque trabaja con su madre vendiendo cervezas, gaseosas y agua en los eventos en cualquier parte del país (desde el partido de futbol del sábado, hasta la celebración del Frente el 15 de marzo pasado)... ella dijo que pagaría sus deudas que son pocas y las de su madre y su abuela, que son muchas, y compraría una casa... hasta allí llegan sus aspiraciones y su necesidad de prosperidad... yo no dije que cada vez que no logro dormir pienso en lo que haría con unos cuantos millones... siempre termino imaginando un fondo patrimonial, una especie de banco de los y las trabajadoras para hacer prestamos a interés bajo para iniciar proyectos productivos y habitacionales... imagino la posibilidad de recuperar el centro histórico de san salvador... pero esto no lo cuenten a nadie... les quiero mucho, mucho… Mama