Los niños y las niñas de mi país

La Jimena fue de “particular” al colegio… pantalones jeans y camiseta blanca con adornos coloricos y brillantes que, sin anteojos, no logre descifrar cuando llegó a mi cama para despedirse con un besito… iba feliz para celebrar el día del niño y de la niña… en El Puentecito también celebraran hoy esta festividad, imagino felices a la Ariela Sofía y los pequeñitos que recibirán un regalito de parte de Flor… pienso en Camila y seguro también tendrá celebración en su escuela… y en Rodriguete y Diego quienes aunque se sientan adolescentes, jóvenes y ya no niños, también hoy es su día según la Constitución de la Republica de El Salvador, que considera niños y niñas a quienes no han cumplido los 18 años de edad…

En mis tiempos, no se celebraba este día, al menos yo no lo recuerdo… después solamente de decía el era el día del niño, en la actualidad, con el enfoque de equidad de genero, decimos que es el día del niño y de la niña… claro que han ido cambiando en el tiempo los derechos de la humanidad, de los niños y las niñas en este caso… hace unos años, Florcita salía a la calle por esta fecha con pancitos preparados y otras golosinas a repartir entre los niños y la niñas de la calle…

Los niños y las niñas de mi país son muy diversos… algunos van a escuelas bilingües, viven en las nuevas residenciales allá por Zaragoza, camino al puerto de La Libertad, por las zonas exclusivas y mas altas de Santa Elena, y en esas casas grandes y bonitas que se logran ver desde las carreteras y calles, allá arriba en las laderas de la cordillera del Bálsamo, las faldas del Volcán de San Salvador, en Antiguo Cuscatlan y otros municipios… tienen carro desde los 15, viajan fuera del país en sus vacaciones, que son a la mitad del año; empleadas domésticas preparan sus alimentos que generalmente tienen en exceso, comen alimentos chatarra y después van a la dietista y al gimnasio para ponerse a régimen y perder peso; a estos casi no los veo porque no voy a la Zona Rosa, y no frecuento Multiplaza ni la Gran Vía… me los he topado alguna ves en el aeropuerto compartiendo mi vuelo hacia Atlanta, grupitos de ambos sexos, bien vestidos, al cuidado de mas de una maestra…

Al otro extremos, en mi país hay muchos niños y niñas a quienes le falta el pan cada mañana, con suerte comparten una cama con padres, madres o hermanos, con suerte tienen un techo con una que otra gotera, pero podrían vivir en una covacha con paredes de plástico y techo de laminas sueltas, solo sujetas con cachivaches encima, podrían vivir al borde de un barranco, viendo como las lluvia erosionan la tierra, o las quebradas de invierno se llenan de agua con una tormenta, ante la angustia de que la correntada no les pase llevando la casucha; en las zonas urbanas y sub urbanas hay niños y niñas abandonados en las calles, huelen pega, limpiavidrios con trapos sucios que te dejan mas mugroso el parabrisas, venden frutar o verduras o piden pisto en los semáforos, se pierden en la droga y/o se meten a las maras…los niños y las niñas en las zonas rurales van a la escuela con el estomago vacío, quizás caminando mas de 2 o 3 kilómetros, con zapatos que no son de su medida porque los recibieron regalados de otros niños y niñas mas favorecidos por la suerte… en sus vacaciones van a las cortas de café, y se les ve prendidos de las ramas, desgranando frutos verdes y maduros; en los patios, separando los frutos rojos de los verdes; cargando pesados bultos llenos de granos de café… igual que los anteriores comen comida chatarra, sus madres, en la total ignorancia, cambian huevos por churritos y colas, generalmente salva-cola que es la mas barata… los suelo ver en las casas campesinas por donde me lleva mi trabajo, en el patio de la finca de Totolco… generalmente son flacos y pálidos, curtidos por la mugre se les ve “caretos”, como diría mi abuela Chabe para denotar que andan con la cara sucia, con codos y rodillas ennegrecidas por la tierra y la falta de agua… tienen cabellos enredados y piojos en abundancia, uñas mas cortadas, dientes amarillentos y sarrosos… algunos son obesos pero mal nutridos, porque la gordura nunca ha sido muestra de buena alimentación… los he visto en Guaymango, Cushinahuat, en la finca El Portezuelo de Juayua, en Perquin, El Mozote, Arambala, Nahuaterique y El Manzano… niñas escuálidas que casi desaparecen en su delgadez, haciendo equilibrio con los cantaros llenos de aguas en la cabeza; niños cuma en mano chapodando bajo el sol de la media mañana, casi al borde del mediodía, niñas con guacales de nixtamal o masa entrando o saliendo del molino, niños y niñas curileros cebadera al hombro, pequeños pescadores lanzando la atarraya, cazadores de garrobos con hondillas…